LOS VINOS DE LA BODEGA MONASTERIO DE CORIAS OBTIENEN DOS MEDALLAS EN EL XXIII CONCURSO INTERNACIONAL DE VINOS DE MONTAÑA

Los vinos Monasterio de Corias “Finca los Frailes” y Corias Guilfa, dentro de la Denominación de Origen Protegida Cangas, obtienen sendas medallas de oro y plata en el XXIII Concurso Internacional de Vinos de Montaña, celebrado en Aosta, Italia, único concurso internacional que valora los vinos elaborados en zonas de montaña adscritas al CERVIM.

Los resultados de la 23ª edición del CONCURSO INTERNACIONAL DE LOS VINOS DE MONTAÑA, cuya selección ha tenido lugar en Sarre el pasado Julio, contó con la participación de alrededor de 602 vinos procedentes de 9 países europeos.

Las catas han dado lugar a resultados muy importantes: un total de 191 medallas asignadas, de las cuales 4 Gran medalla de oro que han obtenido una puntuación igual o superior a los 94 puntos, 62 las medallas de oro asignadas y por último 125 medallas de plata. 

El CERVIM, Centro de Investigación, Estudio, Salvaguarda, Coordinación y Valorización de la Viticultura de Montaña, es un organismo internacional constituido en 1987 bajo la voluntad de la Organización Internacional de la Viña y del Vino. Fundado específicamente para valorar y salvaguardar la viticultura heroica. Los criterios que definen la viticultura representada son:

• terreno con más del 30% de pendiente;
• altitud superior a 500 metros sobre el nivel del mar;
• viñas en terrazas de cultivo o paratas;
• viticultura de las pequeñas islas.

El Monasterio de Corias “Finca los Frailes” es el único vino español que alcanzó la Medalla de Oro en su categoría. Elaborado con las variedades tintas tradicionales de la zona: Albarín negro, Mencía, Carrasquín y Verdejo negro, pasa por doce meses de crianza.

El Corias Guilfa tinto, elaborado con Carrasquín y Verdejo negro, variedades tintas minoritarias y propias, pasa un tiempo de crianza en barricas de roble francés.

La bodega Monasterio de Corias refrenda los éxitos obtenidos en ediciones pasadas con la obtención de varias medallas de oro y plata para sus vinos blancos. En este caso, la satisfacción en mayor si cabe, dado que las medallas otorgadas en la presente edición son para dos vinos tintos, grandes desconocidos y que gracias a la labor de recuperación de la vitivinicultura de la zona, labor que se ha venido realizando durante los últimos quince años, está permitiendo recoger los frutos del arduo trabajo realizado.